Pon un Nenúfar en tu acuario - Nymphaea Lotus

Os voy a contar mi experiencia y la historia que vivimos con nuestro nenúfar.


Estábamos viendo las plantas de una tienda y decidimos apostar por un nenúfar (Nymphaea Lotus) que nos había llamado la atención, porque tenía 3 flores a punto de abrirse. Es una planta que no habíamos visto anteriormente en nuestro circuito habitual de tiendas y decidimos comprarla para probar.

Nuestro primer reto fue plantarlo en el sustrato. Tengo que confesaros que me encontré con varios problemas que acabaron en "tragedia".

Tenía unas hojas muy largas y muy fuertes, junto con numerosas raíces que surgían de un bulbo, sorprendentemente pequeño para la cantidad de hojas, flores y el grosor de los mismos. Mi primer problema era que el bulbo tenía más ganas de flotar que de quedarse en el fondo del acuario. Hice un buen hueco en el sustrato para que no se deterioraran las raíces, y después de introducir el nenúfar lo tapaba, pero finalmente acababa saliendo a la superficie.

En una de las numerosas veces que lo intenté anclar tuve la falta de delicadeza suficiente para que se rompiera un trocito del bulbo. Mi primera sensación "¡¡la he armado!!", la segunda coger ese trocito que era de alrededor de medio centímetro y plantarlo en la esquina contraria al bulbo original. Finalmente conseguí fijarlo ayudándome de una piedra plana enterrando el bulbo debajo.

Qué pasó días después, una de cal y otra de arena. Fueron marchitándose todos los capullos (cómo me fastidió) sin florecer y las hojas con los tallos más gruesos, pero a cambio comenzaron a brotar unas hojas más finas y de tallo más corto. Mi sorpresa fue que del minúsculo pedazo que había plantado también comenzaron a surgir  unas hojas similares a las del bulbo principal. Al menos no se me había muerto el nenúfar.

Pasaron los días y se pobló de hojas de tallo fino y de grosor como el papel de fumar, que no alcanzaban la superficie del acuario. Se ve que los ahora dos bulbos estaban recuperándose de su escisión y reuniendo fuerzas para pasar a la ofensiva.

Llegó el día en que nuestro bulbo de nenúfar original sacó una hoja que ya llegaba a la superficie, pero con un tallo mucho más fino que las hojas que tenía cuando llegó a nuestro acuario. Fueron pasando los días y continuaban saliendo más hojas que cada vez ampliaban ligeramente su tamaño respecto a sus predecesoras. Se ve que se estaba adaptando a las condiciones del acuario mientras se recuperaba.

Finalmente nos llegó la gran alegría de la aparición de un capullo que curiosamente poseía un tallo mucho más grueso que el de resto de hojas. Cuando la flor ya había crecido hasta superar ampliamente la superficie del agua pudimos observar que surgía otra flor de la base. Qué emoción ver que se había recuperado, ahora sólo nos quedaba esperar a que las flores se abrieran y poder disfrutar de este espectáculo de la naturaleza. Hemos tenido 4 flores de momento en un espacio de 2 semanas y estamos encantados. Las fotos que veis en el artículo son las flores sobre las que os he hablado.

Otro aspecto que no se suele destacar es el perfume de esta flor, las que tenemos en casa huelen muy bien, no tienen una gran intensidad como los lilium que podéis tener en vuestras casas o decorando celebraciones, pero a cambio posee una fragancia sutil muy agradable. ¡¡Olfatéalo si encuentras uno!!

Sólo os puedo recomendar encarecidamente que si os cuadra en el diseño de vuestro acuario, no dudéis en agenciaros uno. Lo vais a disfrutar de verdad.